La utilización del aire comprimido, está directamente relacionada con el consumo de la energía eléctrica que la produce. Es importante crear un histórico de todo el sistema de generación, distribución y utilizaciones de aire comprimido, con la finalidad de tener instalada una red eficiente que tenga como objetivo mejorar los costos operativos.
El conocimiento y su registro respecto a la capacidad instalada, permitirá documentar como ésta siendo operado el sistema y la capacidad real de generación para futuras ampliaciones de la demanda.
En la actualidad, el 90% de las industrias, utilizan aire comprimido en sus procesos productivos. La sencillez de operación, la disponibilidad, la facilidad y la seguridad en el manejo de los equipos, dispositivos y herramientas neumáticas, han propiciado una gran utilización de la energía de presión producida por el aire comprimido. A pesar de ello, los sistemas de producción y/o generación de aire comprimido, la distribución y sus utilizaciones, se mantienen en un alto porcentaje en estado de descuido y con un escaso mantenimiento preventivo y predictivo, lo que ocasiona bajos rendimientos y un elevado desperdicio de energía.
Una auditoria de control, y un pormenorizado análisis del sistema, busca una eficiencia de la producción. En función de los costos de la energía, los procesos pueden perder su eficiencia, dado que estos costos de energía, afectan directamente a los costos de producción. Por otra parte el ahorro de energía está comenzando a transformarse hoy en día en una importante ventaja competitiva, poco conocida y poco utilizada en la tecnología del aire comprimido. Por lo que el objetivo de mejora perseguido sería la disminución de costos operativos, mejorando la eficiencia del sistema.
El aire comprimido no es visto en general como un costo de producción, sin embargo éste no es gratuito, y su generación requiere una gran cantidad de energía.
En muchas plantas industriales, los compresores consumen mayor electricidad que cualquier otro tipo de equipos. Las ineficiencias en el sistema de aire comprimido así como sus costos de mantenimiento, pueden por lo tanto ser muy elevados. Es así que, los ahorros de energía por mejoras en el sistema, pueden ir desde el 20% al 50% o más del consumo eléctrico.
Un adecuado gerenciamiento del sistema de aire comprimido podrá por lo tanto:
- Ahorrar energía
- Reducir compresores en servicio
- Minimizar el mantenimiento (tiempos y costos)
- Disminuir el tiempo de equipos fuera de servicio
- Incrementar la producción
- Mejorar la calidad de la producción
- Reducir importantes costos en scrap (Desperdicio)
El sistema
Mejorar y mantener un elevado desempeño del sistema de aire comprimido, requiere no solo controlar los componentes individuales, sino analizar la provisión y la demanda del sistema, y cómo ellos interactúan. La mayoría de las instalaciones de aire comprimido, utilizan una energía considerablemente mayor que la necesaria para soportar la demanda.
Provisión (Compresores + Tratamiento de aire): De una adecuada provisión, resultará un aire seco, limpio y estable, que esté siendo entregado a la presión adecuada, y con un costo efectivo y controlado.
Demanda (Almacenamiento + Distribución + Equipamientos de consumo): Un correcto manejo de la demanda, minimizará las pérdidas de aire, disminuirá un uso irracional, y lo utilizará en aplicaciones apropiadas.
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| Ahorro de Aire Comprimido - Ahorro de Energía Eléctrica |
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